Personal de la Aduana de Chile descubrió que, ocultas detrás del tablero en su camioneta, intentaba pasar 113 municiones de distintos calibres.
Durante uno de los controles de rutina a viajeros y vehículos que ingresan a Chile, un equipo de fiscalizadores de la Administración de Aduanas de Osorno descubrieron una importante cantidad de municiones que eran transportadas por un ciudadano argentino que se presentó a revisión en el paso fronterizo Cardenal Samoré, en la Región de Los Lagos del vecino país.
L.M.S. viajaba desde Mar del Plata en una camioneta cuando fue sorprendido con los productos prohibidos, consistentes en 113 municiones sin percutir: 25 balas calibre 22 mm, marca FM de punta hueca alta velocidad; 40 balas calibre 22 mm, marca Orbea punta sólida alta velocidad; 44 balas calibre 9 mm, marca Waffen; y 4 Balas calibre 9 mm, marca Magtech.
La Administradora de Aduanas de Osorno, Olga Oyarzo, destacó que “el procedimiento se enmarca dentro del trabajo constante de protección de las fronteras y las personas que ejecuta el Servicio, para evitar que productos prohibidos y altamente peligrosos ingresen al país”.
La autoridad aduanera del vecino país también explicó que las mercancías venían ocultas detrás del tablero del vehículo “con la evidente intención de ingresarlas como contrabando”.
Las mercancías fueron inmediatamente incautadas y por instrucción de la Fiscalía Local el ciudadano argentino, junto a las municiones y los medios de prueba, fueron puestos a disposición de efectivos de Carabineros.
