Gabriela es Técnica en Cerámica Artística y llegó a Villa La Angostura en el 2001. Se recibió en el año 1999 en la Escuela Nacional de Cerámica N°1 de Bulnes y abrió el taller “7 Elementos” en julio del 2015.
“Este oficio ha cambiado mi vida completamente. Le ha dado un sentido, me ha hecho crecer mucho como ceramista, docente y sobre todo como persona”, confiesa Gabriela a LA ANGOSTURA DIGITAL.
Al año de llegar a Villa comenzó a dar clases de alfarería en torno con grupos pequeños de hasta dos alumnos. “En el año 2009 comienzo a dar clases en la Casa de la Cultura de la localidad armando grupos de alfarería en torno de hasta 4 alumnos”, expresa.
“También entre el 2010 y 2015 dicté clases de Moldería Cerámica en la Casa de la Cultura, enseñando a realizar moldes de 1, 2 y 3 taceles”, agrega. Y nos explica que los taceles son las partes que forman los moldes, y que los mismos son exclusivamente de yeso. Lo que permiten esos moldes es la reproducción indefinida de un objeto cerámico.
Siguiendo con la línea de tiempo hasta la actualidad, entre el año 2013 y 2018 inclusive dictó clases de cerámica Manual en el Centro Educativo Terapéutico de la localidad, donde asisten personas con capacidades diferentes y también pacientes derivados del servicio psicosocial del Hospital Local.
Entre medio de eso llegó su propio espacio: 7 Elementos. El mismo está ubicado en Las Retamas 418 del barrio Las Piedritas, y allí se brindan talleres y cursos para todas las edades. “Fue una idea que surgió por necesidad. Necesidad de un espacio propio, de un espacio fijo donde dar clases, donde poder aprender teniendo todos los materiales y herramientas necesarias para que el aprendizaje sea lo más completo posible. En general en la mayoría de los lugares no encontraba esa posibilidad de llegar a ese punto”, cuenta Gabriela en cuanto a cómo nació 7 Elementos.
Ahí Gabriela dicta clases regulares de alfarería en torno, en grupo de hasta 7 alumnos. También moldería, decoración cerámica, entre ellos engobes, esmaltes. “Mi mayor desafío es que aprendan el proceso del oficio de principio a fin. También nos explica que los engobes son la decoración más primitiva de la cerámica y están compuestos de arcilla, oxido o pigmento y un fundente que ayuda a que el color no se salga de la pieza. Los óxidos son los colorantes fundamentales que intervienen en la coloración de todas las piezas cerámicas y se explaya diciendo que puede ser de hierro, de cromo, de cobre, de manganeso y de cobalto. Culmina diciendo que ahora se pueden comprar, pero que antes era todo obtenido de la naturaleza.
“La cerámica y alfarería en torno es una actividad terapéutica donde podemos desarrollar y descubrir nuestra creatividad. Es muy enriquecedora la transmisión de conocimientos en los grupos donde hay alumnos principiantes, intermedio y avanzados”.
“Todos los años vienen docentes de todo el país a dar cursos y seminarios con el fin de ampliar el abanico de conocimientos del oficio cerámico para quienes concurren al taller, como así también para ceramistas del pueblo y otras localidades”.
“Los primeros días del año nos visita el profesor Emilio Villafañe, uno de los principales referentes del oficio cerámico del país a dar un taller de esmaltes vidriados cerámicos para alta y baja temperatura. Se inscribieron ceramistas de todo el país. Es una alegría enorme que Emilio sea colega amigo y venga al taller casi todos los años desde 2018 a compartir sus conocimientos”.
En cuanto a cómo nació 7 Elementos, Gabriela agregó que la idea de armar el propio taller tenía que ver con la demanda que había en ese momento, en el 2015. Si bien ocupaba horas en la casa de la cultura, no eran las necesarias respecto a las que demandaban la cantidad de alumnos que tenía, debido a que había otras actividades también. “Estoy muy agradecida por el espacio y porque ahí empecé mi camino también”.
“Empecé a buscar locales para alquilar con la ayuda y el apoyo de mis amigos que son incondicionales. Habré tardado unos 4 meses en encontrar el local ubicado en las retamas y mis amigos y colegas me ayudaron un montón en el armado que fue todo a pulmón. Los muebles los hice yo con mis amigos, y de a poco fui sumando herramientas, materiales, moldes. Hoy lo miro después de siete años y medio desde que abrí y es un esfuerzo enorme”, confiesa emocionada Gabriela.
Gabriela se encarga de todo: del taller, de las redes, la promoción, las publicidades, las inscripciones, las señas, el horneado de las piezas, los flyers, toda la organización. “Es algo que me consume mucha energía, pero que a la vez es un sueño cumplido. Cuesta más mantenerse que el inicio, porque intento siempre sumar nuevas cosas y aprender nuevas técnicas para enseñar y que vengan distintos docentes que enseñan diferentes técnicas dentro del oficio cerámico”.
“Ahora me siento agradecida de todo lo que se genera en el taller, en la herramienta que brinda a la gente del pueblo, a los de afuera y a los que se acercan. Cuando hay seminarios viene gente de todo el país, también organizamos el primer encuentro en Angostura de ceramistas; vinieron docentes y alumnos de todo el país también. Cuando se acercan los turistas a tomar clases porque vieron el taller por las redes y lo quieren conocer, aprender algo o disfrutar un momento de creación en el taller”.
“La verdad que en un primer momento no tome dimensión de todo lo que estaba generando, recién ahora lo estoy haciendo, a medida que iba transcurriendo y la verdad es que estoy agradecida y muy feliz por todo esto que se gestó.
Afirma que el hecho de poder compartir todo lo que aprendió y aprende, porque asegura que un ceramista nunca deja de aprender, es lo más lindo que le deja el oficio. “Compartirlo con colegas, alumnos y con todo aquel que se quiera acercar a 7 Elementos es lo mejor”.
“Soy ceramista hace 25 años y me da mucha alegría el camino construido”, culmina Gabriela. El espacio 7 Elementos está ubicado en Las Retamas 418, en sus redes sociales (“7_elementos” en Instagram) se pueden ver todos los talleres que se brindan, y todas las creaciones hechas.
