Fue la pena que el juez Ignacio Pombo le impuso al imputado, a partir de un acuerdo alcanzado entre la fiscalía de Villa La Angostura, la defensora particular, con el consentimiento del acusado, que comenzó a cumplir desde este martes la condena.
El juez Ignacio Pombo homologó un acuerdo pleno que alcanzaron la fiscalía y la defensa, con el consentimiento del imputado, para resolver el conflicto. En consecuencia, el magistrado condenó a un año de prisión de cumplimiento efectivo a un hombre por las agresiones y amenazas en contra de su expareja.
La audiencia se hizo este martes en Villa La Angostura y el acusado llegó a juicio detenido porque le habían impuesto prisión preventiva.
Fuentes judiciales informaron a LA ANGOSTURA DIGITAL que el fiscal de la localidad Adrián De Lillo presentó ante el juez el acuerdo alcanzado con el imputado y su defensora particular Lorena Miani.
El varón imputado, cuya identidad las fuentes mantuvieron en reserva, admitió haber sido el autor de las agresiones y amenazas contra su expareja.
Los dos hechos que la fiscalía le atribuyó al acusado ocurrieron en la vivienda de la víctima, ubicada en esta localidad. Según la acusación de la fiscalía, el imputado se presentó en la casa de su expareja y se originó una discusión con la mujer.
En esas circunstancias, el imputado la agredió físicamente, además de amenazarla y dañarle su teléfono celular.
En acusación, la fiscalía mencionó la evidencia recolectada durante la investigación y destacó que esas pruebas permitían el dictado de una sentencia condenatoria.
Recordó que contaban, sobre todo, “con las manifestaciones de la víctima, quien expuso la situación sufrida en forma clara y precisa”, aseguraron este martes desde el Ministerio Público Fiscal.
“Dicha información fue avalada por otras pruebas que fueron explicadas” por la fiscalía.
“El suceso fue calificado como constitutivo de los delitos de violación de domicilio, lesiones leves calificadas por el vínculo y haber sido cometidas en contexto de violencia de género, y daño, todos en concurso real”, explicaron las fuentes.
Mencionaron que el juez Pombo “dictó sentencia de responsabilidad penal contra el acusado y además le impuso la pena de un año de prisión de efectivo cumplimiento, la cual empezó a ejecutarse desde el día de la fecha (por este martes)”.
Las fuentes comentaron que las partes que intervinieron en este caso “haciendo un análisis del conflicto planteado, consideraron que la mejor respuesta judicial era este acuerdo, en pos de poner en valor la palabra de la mujer denunciante y la posibilidad de reflexionar del condenado”, aseveraron.
Valoraron que tanto la fiscalía, la defensa y el juez aplicaron la perspectiva de género para definir el caso.
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