El Gobierno nacional aún no le da respuestas sobre el Plan Nieve a las provincias. Aseguran que peligra el comercio terrestre y los cruces fronterizos, como el Cardenal Samoré o Pino hachado.
n la zona Patagónica es imprescindible que en la época invernal Vialidad Nacional realice los trabajos necesarios para el deshiele de las rutas y Pasos Fronterizos, para que los vehículos puedan transitar de forma adecuada debido a la gran cantidad de nieve que cae sobre los caminos. Si estas tareas no se llevan a cabo, lamentablemente es imposible circular y no hay otra alternativa que cerrar las distintas carreteras, poniendo en serio peligro la economía de las provincias.
Con la proximidad del invierno, el presidente Javier Milei, aún no activó la campaña invernal para que el mantenimiento de más de 7.500 KM de 11 rutas nacionales estén óptimas para circular, por lo general, la misma se coordina a principio de todos años. Ante está inacción, toda la zona de la cordillera Argentina puede quedar aislada si no se ejecuta de inmediato un plan para mantener transitables las rutas nacionales del país.
El encargado de comunicar a las provincias sobre cómo se llevará a cabo el Plan Nieve 2024 es el Gobierno nacional, pero ante la falta de iniciativa y comunicación las autoridades de Neuquén, Río Negro, Chubut, Santa Cruz, La Pampa, San Juan y Tierra Del Fuego, se contactaron con Vialidad para entender qué es lo que va a pasar con el operativo.
Para que la campaña invernal funcione, se necesitan al menos tres meses de programación, porque hay que comprar materiales y ver si son necesarios adquirir nuevos equipos, ya que algunos de los usados en operativos anteriores no se encuentran en buen estado. Dese el 2021 hasta el 2024, el Plan Nieve llevaba invertidos $15.900 millones.
Los trabajos de mayor intensidad se llevan a cabo en cruces fronterizos como Cardenal Samoré y Pino Hachado, en Neuquén; Huemules y Futaleufú, en Chubut; y el Sistema Cristo Redentor y Paso Pehuenche, en Mendoza, donde la acumulación de nieve es muy significativa.
En este marco de incertidumbre, el diputado nacional de UxP, Martín Soria, pidió al Gobierno nacional que “informe de manera urgente las obras de mantenimiento y las inversiones que debe realizar en Rio Negro”. Además, fue muy duro con el presidente y sus políticas de ajuste al decir que si no se lleva a cabo la campaña “significaría el cierre unilateral -sin previo aviso- de un programa nacional fundamental para nuestras provincias; a la vez que muestra, una vez más, la desidia e irresponsabilidad con la que Milei, al no realizar los trabajos anuales de mantenimiento invernal, pone en riesgo tanto la vida de quienes circulan por la provincia como el flujo comercial de la región”.
Con respecto a las licitaciones para la compra de los insumos, Soria aseguró que “no se iniciaron y no se adjudicaron obras vinculadas al plan”, por ese motivo esto “puede conllevar daños irreparables a la infraestructura vial nacional de nuestra Patagonia, poniendo en riesgo vidas, el flujo comercial de la región y perjudicando tanto nuestros circuitos productivos provinciales como el comercio internacional con Chile”.
En la misma línea, un funcionario técnico nacional en dialogo con LPO, explicó que la campaña no solo implica “pasar con una barredora, porque a las 3 de la mañana tenés que empezar a trabajar para que una ruta esté transitable a las 10. Hay que tirar una solución salina, después sal gruesa, pasar con máquinas. No es solo comprar nafta”.
“Necesitas casillas para que vivan los trabajadores, tanques, neumáticos y una serie de insumos. Si se congela la ruta se rompe y es imposible sacar el hielo”, remarcó el funcionario, agregando que desde su punto de vista “Vialidad puede dejar de hacer obra pública, pero nunca puede dejar de mantener las rutas. Ya se ve el pasto crecido en muchas rutas y dejaron de tapar los baches. Tarde o temprano eso trae accidentes de tránsito”.
Esta problemática, puede llegar a generar una nueva disputa con los gobernadores patagónicos, ya que si no reciben una respuesta antes de que comience el otoño, las provincias se verán obligadas a desembolsar dinero propio para que las rutas Argentinas puedan estar habilitadas y no se vean comprometidos los recursos económicos de cada una de las regiones.