Desde el hospital Oscar Arraiz informaron que hasta las 11 de hoy los casos de gastroenteritis aguda subieron a 112 y que todavía no se encuentra el germen que causó este brote.
“De las personas que requirieron atención, dos personas fueron internadas, una de ellas derivada por requerimientos de mayor complejidad. El resto fue dado de alta luego de recibir la observación y el tratamiento requerido”, comunicaron.
Finalmente señalaron que “hasta el momento no se ha identificado el germen causante que originó el brote, a fin de colaborar con identificación se solicita remitir las muestras de materia fecal solicitado por el personal de salud, en la guardia o en el Laboratorio de nuestro Hospital. Solicitamos a la comunidad mantener las medidas de cuidado y prevención”, pidieron.
Un problema en el agua
El intendente, Javier Murer, aseguró que el origen del problema se podría haber desencadenado luego del temporal que vivió la zona cordillerana durante el fin de semana largo. «El temporal hizo que se cortara el suministro de energía, lo que paró el bombeo de agua dejando a la localidad sin agua podría haber afectado la potabilización del agua», dijo.
El vaciamiento de los tanques de potabilización de agua o la clarificación inadecuada ante la demanda podría haber favorecido a la «filtración de algún microorganismo presente en los caños o las napas», según explicaron desde el hospital.
Ante esto, el área de Bromatología comenzó con el testeo para determinar si efectivamente el agua es el causal de los casos de gastroenteritis. «Los índices en algunos casos son normales y en otros son un poco más bajos, pero sigue siendo apta para el consumo», aseguró.
Desde el hospital informaron que los resultados de los análisis que se realizan en el agua podrían tardar entre cuatro y cinco días, por lo que la confirmación de las sospechas se daría la próxima semana. La Provincia confirmó la espera de estos resultados.
