Se concretó por una iniciativa de Emilio Casares y un grupo de vecinos, con el apoyo de la Iglesia Católica que cedió un espacio en el predio donde se encuentra la Capilla de la Asunción, pero además se sumaron otras iglesias locales. Entre los vecinos se lograron reunir 35 millones de pesos.
Es una iniciativa comunitaria, inspirada en el Hogar Emaús de Bariloche, que busca dar alojamiento nocturno a hombres mayores de 18 años en situación de calle.
Son parte de este emprendimiento el Hospital local, la Iglesia Bautista, la Iglesia Católica, la Municipalidad y los vecinos, cada uno con su aporte.
La Iglesia Católica aportó el predio al lado de la capilla de la Asunción, la Municipalidad los empleados que gestionan el Hogar, la comida y el pago de los servicios, los vecinos nos hicimos cargo de la refacción y acondicionamiento del lugar, el Hospital acompaña para garantizar la salud integral de los huéspedes y fieles de ambas iglesias y vecinos nos hacemos cargo de los voluntariados, uno de cocina responsable de preparar la cena cada noche y otro de ropero para tener mudas de ropa disponibles y de lavar la ropa con la que llegan y la ropa blanca.
“La refacción del predio ha requerido hasta ahora unos 35 millones de pesos que fueron aportados integralmente por vecinos, ya sea en dinero o en donaciones de materiales o mano de obra. Ha sido muy bonita la disposición de los vecinos a colaborar, destacó Emilio Casares.
El Hogar funciona de 20 a 9 horas, se recibe a la persona, se le hace una evaluación para definir que cumpla los requisitos establecidos para poder ingresar al Hogar, se le da una muda de ropa limpia, una ducha caliente, una rica cena y una cama cómoda, a la mañana el desayuno y la persona vuelve a su vida.
En la inauguración estuvieron presentes el Intendente Municipal, la Directora del Hospital, el diácono de la Iglesia Católica, el Pastor de la Iglesia Bautista, la Directora de Desarrollo Humano, el Comisario, el responsable del Hogar Emaús de Bariloche y una importante cantidad de vecinos.
Lo que se vivió fue una jornada solidaria, donde los que hablaron remarcaron la importancia de que este tipo de problemática sea encarada de manera conjunta.
Emilio Casares destacó que “se sintió lo que llamamos el “espíritu Bartimeo” esto es la amorosa disposición de todos los involucrados, a dar su pequeño aporte para ayudar a mejorar un poquito la vida de estas personas. Necesitamos que los vecinos se sigan sumando, lo pueden hacer donando dinero, sumándose como voluntarios ya sea al grupo de comidas o al de ropa, o como “Amigos de Bartimeo” donde se comprometen un aporte mensual.
Cualquier interesado escribe al 1154568617.