La jueza Mirta Bibiana Ojeda sobreseyó a los cinco policías de la Comisaría 28 que actuaron la noche en que falleció Robinson Gatica.
De esta manera quedaron libres de los cargos los efectivos Víctor Hugo Muñoz, David Ezequiel Cuevas, Alejandro Bravo, Darío Luis González y Erwin Alejandro Mora, que están imputados por el homicidio del empleado municipal Robinson Gatica.
Un grupo de policías fue hasta el domicilio y trataron de reducir a Gatica. El joven estaba armado con un cuchillo con el que intentó agredir a los policías. Dos efectivos sufrieron lesiones leves.
Uno de los policías efectuó un disparo con su arma reglamentaria. El proyectil no hirió a Gatica. También recibió varias postas de goma y lo golpearon para reducirlo, pero no pudieron.
Los policías tuvieron que retirarse de la vivienda y la esposa logró persuadir a Gatica para que le entregara el cuchillo. La mujer salió de la casa con el cuchillo y los policías entraron. El joven ya estaba desarmado, lo golpearon y lo aprehendieron. Minutos después murió por causas que aún se investigan.
En las primeras horas tras el hecho, los familiares de la víctima denunciaron un caso de gatillo fácil y de violencia policial. La fiscalía pidió la detención de los policías que habían estado en el procedimiento.
Al día siguiente de la muerte de Gatica, el fiscal acusó a los policías por el homicidio de Gatica agravado porque lo cometieron en abuso de sus funciones como integrantes de la Policía. Era una calificación provisoria, porque la investigación recién comenzaba y no se tenían los informes de los peritos forenses.
El juez admitió los cargos y ordenó la prisión preventiva de los policías, que la cumplieron de manera domiciliaria.
El 17 de noviembre del 2022, la jueza Ojeda dejó sin efecto la prisión preventiva que cumplían desde finales de julio pasado de manera domiciliaria y los cinco acusados quedaron en libertad con varias pautas de conducta.