El auditor finalizó su mandato y renunció al concurso para una nueva gestión. Informó que toda la documentación de la Auditoría “quedó resguardada” en los servidores del municipio, porque pertenece a la Municipalidad de Villa La Angostura. Dijo que bajó su candidatura por temas personales.
Pablo Requejo dejó de ser el auditor municipal de Villa La Angostura tras seis años de gestión. El exfuncionario municipal finalizó este jueves su mandato y además renunció a seguir participando del concurso para un nuevo mandato.
Dijo que terminó su mandato y entregó este jueves la llave de la oficina a través de la secretaria, que fue reubicada en otro sector del municipio porque es empleada administrativa de planta permanente.
“Yo entregué la llave de la oficina, la documentación queda en resguardo en la oficina de la Auditoría, las computadoras las retiró personal del área de Sistemas del municipio. Así que la oficina quedó cerrada hasta que nombren a un nuevo auditor”, informó Requejo a LA ANGOSTURA DIGITAL.
“Yo me bajé de la candidatura por temas personales y notorios de los últimos días”, señaló, en referencia a los severos cuestionamientos y críticas de un grupo de vecinos que presionaron para que no sea reelegido por los concejales.
Requejo era el único postulante en el concurso convocado por el Concejo Deliberante para cubrir el cargo de auditor municipal por otros seis años.
Así que la localidad se quedó sin auditor y sin jueza municipal de Faltas porque María Candelaria Loza Leguizamón presentó su renuncia al cargo de Jueza de Faltas a partir del 15 de agosto pasado porque optó por asumir como jueza de Paz titular, cargo al que fue designada por el Tribunal Superior de Justicia.
Requejo aclaró que “toda la documentación física de la Auditoría, que está toda, queda resguardada por el Concejo Deliberante en la oficina. Y la documentación digital queda grabada en la nube que tiene el municipio y en el disco de resguardo del departamento de Sistemas”.
Hizo la aclaración porque señaló que algunos concejales desconocen esa información y “creen que cualquiera puede borrar cualquier cosa” y dijo que la documentación emitida por la Auditoría municipal “que es un montón en estos seis años, es propiedad del municipio, no es propiedad ni mía, ni del Concejo, ni de algún concejal; es propiedad del municipio de Villa La Angostura”.
“Todo quedó resguardado en los servidores del municipio, para que no suceda como hizo la gestión anterior”, indicó. “Cuando entré no había ningún archivo”, recordó.
Los concejales deberán volver a convocar a un nuevo concurso público para cubrir el cargo de auditor. Para convertirse en auditor se requiere por lo menos del voto de cinco de los siete concejales.
Los concejales habían entrevistado a Requejo y faltaba que se votara su candidatura, pero no tenían los votos garantizados.
“Es una etapa terminada. Ojala que venga un auditor que no sea tan vapuleado por el periodismo amarillo porque si no no va a poder trabajar”, sostuvo.