El paso fronterizo Cardenal Samoré, uno de los principales accesos entre Argentina y Chile, se convirtió en un verdadero desafío para los viajeros en los últimos días. Testimonios de turistas reportaron esperas de hasta 6 horas para cruzar la frontera, generando malestar y largas filas de vehículos.
Uno de los conductores afectados, relató que pasó seis horas esperando en el auto y luego cuatro horas adicionales detenido en la Aduana argentina antes de poder avanzar. “A las 19 horas cerraron el paso y quedaron muchos kilómetros de fila del lado chileno”, describió.
Por otro lado, las cifras oficiales indican que el flujo de visitantes ha aumentado significativamente. En enero, 179.986 personas ingresaron a Chile a través del complejo fronterizo Cardenal Samoré, según informó la Delegación Presidencial de Osorno. Este número representa un crecimiento del 32% en comparación con el mismo período del año anterior.
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Además, se registró el paso de 47.509 vehículos particulares (+41%), 798 buses (+12%) y 3.582 camiones (+13%). La delegada Claudia Pailalef destacó que el 64% de los visitantes fueron argentinos, es decir, aproximadamente 115.000 personas. También resaltó que, en promedio, los vehículos permanecen 35 minutos dentro del complejo, aunque en la práctica muchos viajeros reportaron tiempos considerablemente más largos.
