El procedimiento estuvo encabezado por Prefectura y se dispuso la detención de la mujer. Se incautaron cocaína y otros elementos de prueba destacados.
No hay dos sin tres y una de las narcos más famosas del sur de la provincia, conocida por su apodo de “la Tía”, volvió a caer presa en el marco de una investigación por infracción a la Ley 23.737. El procedimiento estuvo encabezado por personal de la Prefectura Naval Argentina y la mujer quedó a disposición del juzgado federal de la ciudad de Zapala.
La sospechosa, conocida como “la Tía” y con domicilio en el barrio Mallín de La Angostura, viene de ser detenida en otro operativo desplegado en enero pasado por personal de la Comisaría 28. En concreto, la Policía investigaba un robo de elementos menores como una bicicleta y un celular y terminó secuestrando droga por un peso superior a los 2 kilos. El allanamiento se llevó a cabo el 28 de enero y debido a la situación especial de la mujer, con un hijo menor, no se dispuso su prisión preventiva.
En apariencia, lejos de evitar nuevos procesos en su contra, “la Tía” habría reiniciado su actividad delictiva y los sabuesos de Prefectura no solo hicieron un seguimiento de la mujer sino también de los denominados “soldaditos”, que se encargan de la entrega y el cobro a clientes de la droga comercializada.
Incautaron cocaína
Según la información a la que pudo acceder este medio, el trabajo de los efectivos de Prefectura se concentró en el aguantadero de “la Tía” y dos propiedades donde residen sus “soldaditos” o dealers.
Las sospechas de las fuerzas de seguridad nacionales se confirmaron con el hallazgo de una importante cantidad de cocaína. Frente a esta situación, el juez de turno de Zapala dispuso la detención de la mujer. Todavía se desconoce si terminará alojada en alguna cárcel o, como sucedió anteriormente, se dispone otra medida cautelar como una posible prisión domiciliaria o presentaciones periódicas en una oficina judicial o policial.
“La Tía” no solo ha sido investigada por Prefectura y Gendarmería Nacional sino también por la Brigada de Investigaciones de la Zona Sur de la Policía neuquina y, en una mayoría de casos, se le encontró droga en su domicilio.
Debido a su actividad ilegal, el Estado tuvo que intervenir y le supieron sacar los hijos menores de edad y hasta fueron puestos en un hogar.
Pero como la ley 2302 no impide que los chicos salgan del hogar, tanto para asistir a la escuela como para visitar familiares, es que casi todos los días andaban en la calle y regresan para cenar y dormir.
“Los soldaditos de la Tía”
En la barriada del Mallín hay un grupo de entre ocho a diez chicos, todos menores, que se suelen juntar en la casa de la mujer bajo sospecha, se los conoce como “los soldaditos de la Tía”, hacen de todo y ella les paga con dinero o con droga.
En este caso se advierte como afecta el microtráfico a adolescentes que caen en la adicción y después pasan a delinquir para poder seguir consumiendo. Sin lugar a dudas, se trata de un problema grave y que deberá ser abordado por distintos organismos.
