En el mes de diciembre de 1938 se inauguraba el Hotel Angostura. Es el emprendimiento comercial más antiguo de Villa La Angostura pues, a diferencia del Hotel Correntoso, continúa con sus puertas abiertas en forma ininterrumpida desde ese año.
El 9 de diciembre se cumplieron 83 años de la inauguración de un referente histórico de la hotelería en Villa la Angostura: El Hotel Angostura. La historia de este establecimiento nos lleva directamente hasta Ernesto Greenleaf Cilley Hernández – sobrino-nieto del famoso escritor José Hernández- quien se recibió de agrimensor en 1935 y ese mismo año consiguió trabajo en la nueva repartición estatal Dirección Nacional de Vialidad.
Este joven profesional trabajó en la construcción de la primera ruta de pavimento de la región que unía San Carlos de Bariloche con Llao Llao. En 1938 y previa elección del sitio exacto de la construcción del futuro hotel por el arquitecto Alejandro Bustillo tomó la iniciativa del proyecto el arquitecto Miguel Ángel Cesari quien formaba parte del equipo de trabajo de la oficina de proyectos de Parques Nacionales y contaba por entonces veintisiete años.
Realizó con entusiasmo los planos y la dirección técnica de la obra del “Hotel Villa Angostura”, nombre original con el que se denominó la obra; posteriormente con los años cambió por el de “Hotel Angostura” denominación que aún mantiene.
El arquitecto Cesari tuvo una activa participación en la arquitectura que predominó en la zona que abarcaba Parques Nacionales. Contratado en 1935 -a sólo dos años de recibido de arquitecto- se inició en la repartición con un sueldo de $ 350, bajo la categoría de “oficial sexto”. Participó en los proyectos de la Intendencia, Movilidad y Talleres, Varadero y Astilleros, Usina y Hostería Isla Victoria, puentes de madera y piedra, refugio Lynch, estacionamientos, alambre carril, camping, viviendas varias, además del mencionado Hotel Villa Angostura.
El hotel fue fue inaugurado el 9 de diciembre de 1938 y contaba en sus inicios con nueve habitaciones con baño privado y calefacción central – realizada con caños de origen inglés – lo que significaba para la época servicios de vanguardia. Junto a la nueva construcción se mantuvo intacto un añejo Coihue que aún existente y que se calcula supera los doscientos años de vida.
Sus dueños originales fueron los españoles Jesús Prudencio Cores y Carlos Cores quienes lo atendieron en forma personal hasta 1947, cuando ante desavenencias personales, decidieron ponerlo en venta.
El agrimensor Ernesto G. Gilley Hernández se encontraba en ese momento la ciudad de La Plata donde realizaba trabajos de obras viales con su propia empresa constructora y además administraba dos campos de su madre ubicados en general Las Heras y Mar del Plata (Bs. As.). Fue como en 1947 recibió una oferta por la venta del hotel, junto con el envío de dos fotos.
Sin conocer el lugar, ni viajar a verlo, decidió comprarlo “si el arquitecto Alejandro Bustillo estuvo en el tema, no tengo nada que verificar” aducía Cilley, quien expresaba de este modo su admiración por el arquitecto.
El 5 de mayo de 1947 se concreta la venta por un monto total de $ 35.000 m/n (treinta y cinco mil pesos de moneda nacional de curso legal), los cuales se pagaron en cuatro cuotas de $ 8.750 m/n con vencimiento los días quince de junio, y diciembre de ese año, el quince de junio y diciembre de 1948, más el interés del cinco por ciento anual. El anuncio de la venta fue publicado por cinco días en el “Boletín Oficial” de la Capital Federal, en el diario “El Noticioso”, también de esta ciudad, y en los periódicos de “El Territorio” de Neuquén y “Bariloche” de San Carlos de Bariloche.
Es de mencionar que si bien la escritura se firmó en Buenos Aires en mayo de 1947, la posesión del hotel se le había concedido a Ernesto Cilley el quince de diciembre del año anterior. La venta se realizó bajo el sistema “llave en mano” que consiste en la entrega de todo el equipamiento: muebles, utensilios y demás, que se encontraban dentro del hotel a la fecha de la operación comercial.
La familia Cilley lo alquiló para su explotación. Uno de sus concesionarios fue el italiano Sexto Egilli, casado con Lucía Venturini, quien lo administró desde 1960 hasta 1972.
En 1962 se realizó la primera ampliación de seis habitaciones en planta alta en una construcción contigua, dejando sin terminar la planta baja prevista para un gran comedor.
Por aquella época el “Modesta Victoria” llegaba tres veces por semana y debían planearse hasta tres turnos en el comedor a la hora del almuerzo.
En 1972 la familia Cilley a través de María Helena Cilley de Hernández, se hizo cargo, por primera vez, de la explotación del histórico “Hotel Angostura”. Fue en 1973 cuando la familia, en sociedad con Jean Pierre Raemdonck, adquirió la lancha “Huemul II” (pertenecía a la familia Ortiz Basualdo) para realizar la explotación del servicio turístico “Angostura – Bosque de Arrayanes”.
Cabe recordar que desde enero de 1972 este servicio se encontraba interrumpido ante la tragedia del hundimiento del barco “Villa La Angostura” que causó la muerte de doce personas. Esta posee una capacidad para treinta y cinco pasajeros más dos tripulantes (Capitán y marinero), y era impulsada por un motor Perkins seis diésel.
En 1981 se realizó la segunda etapa de obras construyendo un total de cinco habitaciones en la planta baja, completando las veinte habitaciones que posee en la actualidad.
El Hotel Angostura, es el emprendimiento comercial más antiguo de Villa La Angostura, pues continúa con sus puertas abiertas, en forma ininterrumpida desde 1938.
Se ha convertido en un verdadero hito histórico para la hotelería de Villa La Angostura y toda la Patagonia norte.
Yayo de Mendieta
Villa la Angostura