El vecino y economista Rogelio Olivieri Acosta reflexiona sobre el postergado acuerdo con el FMI y las consecuencias para con los argentinos por esta situación.
Sr. Director
Si bien la economía es un factor muy sensible para nuestra sociedad, y el tema deuda con el fondo Monetario pareciera no ser preocupante, conviene reflexionar sobre las consecuencias que tendría un incumplimiento por parte de nuestro País con ese Organismo.-
Hasta ahora lo único que se conoce es la postura del Gobierno de actuar para la tribuna, criticando a dicho Organismo, a los Estados Unidos cuya ayuda es muy importante para conseguir un buen acuerdo y tratar de estrechar relaciones con Países que están fuera del Sistema y no pueden aportar ningún beneficio, o sea una serie de conductas sin sentido que son difíciles de comprender.-
Lo único que se está consiguiendo es que los plazos se están extinguiendo y la situación es muy grave.-
Es como si yo tuviera una deuda con un banco y tengo que ofrecer un plan de pago y me dedico a insultar al gerente, a la empleada y no presento ningún plan.-
Si el banco solicita mi quiebra judicialmente y se aprueba, no tengo más crédito, los acreedores me van a perseguir por todos lados, van a tratar de embargar todo lo que tengo etc.-
En nuestro caso, pareciera que el Gobierno tiene un problema ideológico con el FMI y por eso no puede presentar un plan de pago coherente, basado en reducir la inflación que es un arma mortal para los que menos tienen, ir disminuyendo la emisión monetaria sin respaldo que genera inflación, aumentar las exportaciones para que ingresen más divisas y se pueda eliminar el cepo cambiario, apoyando las pymes y las economías regionales para que exporten más y especialmente generar confianza para que haya nuevamente inversión privada que es fundamental para generar puestos de trabajo y disminuir la desocupación.-
Creo que es un panorama complejo pero simple, que casi todos los países de América Latina vienen cumpliendo y por eso tienen una inflación de un solo dígito, menos nosotros que venimos de un 50% anual y pareciera que para este año será igual o peor.-
Sería interesante generar un debate con fundamentos entre los países que han seguido estos pasos tratando de hacer los deberes y mejorar la calidad de vida de sus habitantes, con los países seudo-populistas que pregonan lo contrario y quieren repartir lo que no tienen y lo que no producen, para que cada uno podamos sacar nuestras propias conclusiones.-
Rogelio Olivieri Acosta
Villa la Angostura
