El candidato a presidente de la Libertad Avanza, Javier Milei, obtuvo el 64 % de los votos que se emitieron este domingo y le sacó más del doble de diferencia al postulante oficialista de Unión por la Patria, Sergio Massa, que cosechó el 30,9 %.
El 64 por ciento de los electores de Villa La Angostura optaron este domingo por Javier Milei para conducir el país durante los próximos 4 años.
Así lo indican los datos provisorios aportados a LA ANGOSTURA DIGITAL desde el campamento de Juntos por el Cambio que respaldó la candidatura del candidato a presidente de la Libertad Avanza.
El candidato oficialista de Unión por la Patria, Sergio Massa, consiguió el 30,9 por ciento de los votos que se emitieron este domingo.
Milei ganó en todas las mesas donde se votó este domingo en esta localidad. El candidato de la Libertad Avanza le sacó más del doble de diferencia a Massa, que había recibido el apoyo de varios partidos, entre ellos, el apoyo del gobernador electo Rolando Figueroa y del gobernador saliente Omar Gutiérrez.
Massa había recibido el respaldo de la amplia mayoría de los intendentes y dirigentes de los principales gremios estatales y del poderoso sindicato de los petroleros privados.
Según datos provisorios, este domingo votaron 9.016 electores que estaban habilitados para sufragar. Solo hubo 290 votos nulos y 140 en blanco.
Fuentes consultadas por LA ANGOSTURA DIGITAL señalaron que la jornada electoral se desarrolló con normalidad en las escuelas donde se votó.
Para el peronismo, y sobre todo, para el kirchnerismo el resultado de las urnas representa una de las derrotas más duras en la arena política.
La enorme diferencia que Milei le sacó a Massa en Villa La Angostura sorprendió porque si bien en las PASO había ganado y también en la primera vuelta, pero pocos pensaban en un triunfo tan contundente.
Todo indica que los votantes que optaron en la primera vuelta por Juntos por el Cambio se volcaron en forma masiva por Milei este domingo.
El resultado de las urnas deja una nueva enseñanza a la ciudadanía que durante semanas escuchó mensajes de campaña de fuerte calibre de uno y otro lado.
Además, mostró otra vez el fracaso de los encuestadores que alimentaron durante varios días la idea de que la elección estaba reñida y que el resultado era incierto.