Desregular el sector aerocomercial permitirá ingresar nuevas compañías y ampliar la oferta, lo que permitiría mayor competencia y por lo tanto bajar el precio de los pasajes que hoy regula en casi todas las rutas de cabotaje Aerolíneas Argentinas.
El presidente Javier Milei anunció por cadena nacional la vuelta de la política de Cielos Abiertos en el sector aerocomecial, una medida que promete traer cola.
La decisión apunta a la liberalización del transporte aéreo civil a partir de acuerdos bilaterales o multilaterales, que apunta al ingreso de nuevos jugadores al sector y la promoción de la competencia para bajar precios y mejorar servicios.
Por ejemplo un vuelo de American Airlines podrá ofrecer desde Estados Unidos un vuelo directo a Bariloche, Córdoba o Mendoza, y de igual manera los argentinos podrán utilizar ese mismo vuelo a un costo menor que el de hoy rige para ir a estos destinos en el país del norte.
En la Argentina se implementó durante el gobierno de Mauricio Macri, a instancias del entonces ministro de Transporte, Guillermo Dietrich. Esa política fue un incentivo para el arriba al mercado de compañías low cost, como Flybondi, JetSmart o Norwegian, una de las mayores low cost del mundo, que finalmente se fue del país durante la pandemia.
También permitió el crecimiento del negocio de otra compañía que ya no está en el país como Latam. La compañía, que es la fusión de la chilena LAN y la brasileña TAM, finalmente se fue del país en junio de 2020.
Todo se precipitó a partir de la presentación de la compañía ante la justicia de Estados Unidos, acogiéndose al llamado Capítulo 11 de la ley de quiebras, por lo que la filial local, con abultado rojo ya no podía acudir a la casa matriz en busca de asistencia financiera.
Pero lo que está detrás es parte del conflicto que puede abrirse a partir de esta decisión de desregular al sector. La permanente pulseada con los gremios – hay siete en el país que intervienen en la actividad- la decisión de los gobiernos de turno de beneficiar a Aerolíneas Argentinas, la línea de bandera, en desmedro de otras compañías, y la búsqueda de un cambio en un sector con posibilidad de crecimiento pero en el que se intentará flexibilizar actividades que tienen prácticas muy arraigadas.
Hoy Aerolíneas Argentinas, empresa que por su parte deberá abrir su paquete accionario al capital privado, en el marco de la idea de transformar las empresas del Estado en sociedades anónimas para luego privatizarlas, domina el mercado aerocomercial.
Ahora la competencia podría ser importante pero lo que es seguro es que el cambio no será fácil y garantiza conflictividad en el sector.