Se amplió la denuncia de las más de 100 viviendas en el sector del Belvedere que están “colgadas” de la red del Epen por integrantes de la Comunidad Paicil Antriao. Denuncian a funcionarios del Epen por cierta complicidad en este acto que representa un perjuicio estimado en unos 5 millones de pesos por mes desde hace varios años.
El Capitán del Ejército argentino (R) José María Alejandro Galli reunió nuevas evidencias que buscan acreditar el robo de electricidad por parte de autores desconocidos en el Camping Correntoso.
Se supo que este jueves, en horas de la tarde, escoltado por su abogado de confianza, Cristian Hugo Pettorosso, el militar retirado presentara más pruebas en la Comisaría local, que demostrarían -según lo denunciado el domingo pasado- la sustracción de energía eléctrica de los generadores del EPEN, mediante conexiones clandestinas que no contarían con autorización ni habilitaciones del mencionado organismo.
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Entre tanto, se supo que la Policía está realizando distintas tareas de investigación por los hechos denunciados.
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Consultado por este medio, el castrense aseguró que las pérdidas de energía son cuantiosas, y que le indigna saber que esta situación se estaría dando desde hace años atrás, expresando que “tanta inactividad del estado me sugiere anuencia cómplice de funcionarios con capacidad de mando dentro del EPEN, porque nadie se explica cómo esta grave irregularidad pasara inadvertida durante tanto tiempo, haciéndoles pagar a los usuarios regulares cifras multimillonarias para suministrar energía a personas que están cometiendo delitos”.
Asimismo, Cristian Pettorosso sostuvo que “podríamos estar ante la puerta de delitos contra la administración pública, toda vez que distintos funcionarios, por motivos que aún desconocemos, habrían incumplido sus deberes de ley al hacer la vista gorda en todo lo que estaba pasando”. También precisó el letrado que “ante la envergadura del daño causado a todos los usuarios en regla del EPEN que siguen pagando las pérdidas de potencia que se disipan por circuitos irregulares, y habiéndose sustraído decenas de millones de kilowatts. me mueve a serias sospechas que esto podría tratarse de un plan diagramado por agentes de gobierno, para facilitar las usurpaciones en los lugares de conflicto”, añadiendo el profesional que “sin esa electricidad, que resulta imprescindible para permanecer los ocupantes estáticos en un lugar, las usurpaciones no podrían haberse mantenido en el tiempo, mucho menos en el Camping Correntoso”, finalizó Pettorosso, adelantando que la pesquisa recién empieza y que harán más presentaciones judiciales.
