Se hace como una medida para incrementar el monitoreo de un ave que es símbolo de Neuquén y que se encuentra dentro de las especies en extinción.
En el marco del primer censo simultáneo de cóndor andino en la Provincia del Neuquén se iniciará el primer monitoreo de ejemplares en el Parque Nacional Lanín.
La iniciativa es organizada por la Dirección Provincial de Fauna, las áreas protegidas, el Centro de Ecología Aplicada de Neuquén y la Fundación Bioandina.
Mediante este censo se podrá conocer el estado de las poblaciones naturales de esta especie amenazada, monitorear su dinámica y evaluar el uso que hacen del ambiente, como así también conocer si se encuentran amenazadas por acciones antrópicas.
Como trabajo previo en la última semana se realizó un relevamiento para identificar los sitios donde serán los próximos monitores, donde se registraron 4 ejemplares.
Esta actividad es coordinada por personal técnico del Departamento de Conservación y Manejo del Parque con la participación de guardaparques de la zona sur.
– Conocé sobre el cóndor andino
El cóndor andino (Vultur gryphus) es una de las aves más grandes del mundo, llegando a medir hasta 1,30 metros de altura y hasta 3 metros con sus alas extendidas.
Se caracteriza por no tener plumas en la cabeza y una bufanda de plumas blancas alrededor del cuello. Los adultos se reconocen por sus plumas negras y blancas a diferencia de los juveniles poseen plumas marrones en todo su cuerpo, mientras que los machos presentan cresta y ojos marrones y las hembras carecen de cresta y sus ojos son rojos.
Como se alimentan de carroña cumple un rol invaluable en los ecosistemas ya que remueve el material orgánico de los diversos ambientes en los que tiene presencia, como restos de osamentas o cadáveres que podrían ser fuentes de contaminación, infecciones y enfermedades.
Esto constituye un servicio ecosistémico de enorme valor por parte de esta especie.
Por otro lado, esta especie es valorada por las comunidades originarias por considerarlos sagrados.