Ninguno de los dos postulantes al cargo reunió los cinco votos que se necesitan para ser designado. Todo indica que en la próxima sesión se deberá volver a llamar a concurso. La Auditoría está cerrada desde finales de agosto pasado.
Los concejales no lograron ponerse de acuerdo este jueves en una sesión especial y ninguno de los dos postulantes al cargo de auditor municipal, la contadora Rosana Diez y el abogado Hugo Farmentano, reunió los cinco votos necesarios y, en consecuencia, el concurso para cubrir ese cargo al frente de ese órgano de control quedó desierto.
“No llegamos a un acuerdo y fue 4 a 3 y se necesita mayoría agravada”, explicó la concejal del bloque Juntos por la Libertad, Lilia Vidal.
Dijo que por Diez votaron el presidente del Concejo Deliberante, el oficialista Sebastián Raimondo y su compañera del bloque Comunidad, Noelia Figueroa, el concejal de Juntos por el Cambio, Héctor Vénica, y la concejal del bloque Primero Angostura, María Eugenia Ceraso.
Mientras que María Eugenia Mesa, del bloque Amor por Angostura, Tomás Andrade, de Avanzar Neuquén, y Vial apoyaron a Farmentano.
“Fue mucho tiempo de debate, nuevas preguntas a los candidatos”, explicó en líneas generales Vidal a LA ANGOSTURA DIGITAL.
Dijo que a favor de Diez se valoró su historia y experiencia como perito en la Provincia y porque es contadora. Explicó que no votó por Diez porque evaluó que tal vez no pueda imponerse para llevar adelante la Auditoría municipal.
“En el caso de Farmentano, tiene un currículum impecable: es abogado, ingeniero y técnico en administración y ha trabajado en todas esas áreas”, indicó Vidal, que votó por ese candidato.
“Es firme en su manera de enfocar este tipo de gestión”, destacó. Pero admitió que en contra tuvo la experiencia que posee la otra candidata.
Vidal comentó que cada concejal se mantuvo “en la elección por convicción, por lo menos en mi caso”. Y de esa forma no hubo consenso.
“No hubo acuerdo. El auditor se designa por mayoría agravada y los votos estaban divididos por lo cual ninguno de los dos postulantes al concurso accedieron al puesto por no alcanzar los votos necesarios por parte de los concejales”, manifestó Ceraso.
“Es así que seguramente, en la sesión siguiente se abra un nuevo llamado a concurso, en el cual los postulantes, por supuesto, se pueden volver a presentar, pero hoy había una falta de consenso”, planteó.
Dijo que los candidatos presentaban “dos perfiles diferentes” y a raíz de eso “es que no se pudo llegar a los cinco votos necesarios para que alguno de los dos quedase designado”.
Antecedentes
La Auditoría municipal fue incorporada en la redacción de la Carta Orgánica Municipal en 2009. Sin embargo, a finales de 2016, el Concejo Deliberante designó a Gerardo Minnaard como el primer auditor municipal tras la reglamentación por ordenanza del funcionamiento de la Auditoría municipal y del concurso para cubrir ese cargo.
A finales de julio de 2017, Minnaard renunció al cargo enfrentado con el gobierno del entonces intendente Guillermo Caruso.
Lo sucedió Pablo Requejo, que ganó el concurso convocado para cubrir esa vacante. Lo designaron en agosto de 2018.
Requejo dejó de ser el auditor municipal a finales de agosto pasado tras cumplir seis años de gestión.
Estaba anotado para un nuevo período. De hecho, era el único postulante en ese momento, pero renunció a seguir participando del concurso.
Mientras, decenas de expedientes de la gestión municipal siguen sin ser controlados por ese órgano.