Así lo expresó el intendente de Villa La Angostura al presentar el proyecto para crear el primer barrio multicultural y un circuito turístico con la comunidad mapuche Paicil Antriao, en el cerro Belvedere. “No voy a mirar para el costado como han mirado tantos”, aseguró ante los concejales.
“No viene a la Municipalidad a dejarle los problemas para que lo resuelva el que viene”, aseguró este mediodía de miércoles el intendente Fabio Stefani en su mensaje a los concejales, que marcó el inicio de un nuevo período de sesiones ordinarias del Concejo Deliberante.
Y confirmó que promoverá el proyecto para crear el primer barrio multicultural en la zona del faldeo del cerro Belvedere, tal como LA ANGOSTURA DIGITAL lo había anticipado.
En esa zona hay desde hace años un conflicto entre familias de la comunidad mapuche Paicil Antriao y particulares por la posesión de valiosos lotes. Varios de esos litigios están en la justicia.
Stefani dijo que les entregará el proyecto a los concejales “porque quiero que lo empecemos a trabajar juntos”.
Afirmó que era un tema delicado pero que estaba dispuesto a tratarlo. “No vine al gobierno para hacer la plancha. No me oculto”, aseguró.
Y mencionó que el proyecto genera un debate en la comunidad, como sucedió con el decreto que abrió la puerta a la regularización de alquileres que estaban en la oferta informal.
El intendente contó que el proyecto había surgido por consenso con los representantes de la comunidad mapuche tras 6 o 7 reuniones.
Destacó que la iniciativa consiste en promover un barrio multicultural y turístico en esa zona del cerro Belvedere. Será “el primer barrio multicultural y turístico de Villa La Angostura”, aseguró.
Y admitió que puede llegar a ser una copia del barrio multicultural que existe en San Martín de los Andes. “Pero nosotros le vamos a poner nuestra propia impronta”, aclaró.
Dijo que es un “proyecto consensuado, trabajado; es un proyecto de integración, de derechos”. Explicó que la idea es generar, junto con el barrio, un circuito turístico y un espacio para desarrollar el arte y la cultura mapuche.
“Lograremos la regularización de las familias, miembros de la comunidad, para garantizar servicios”, enfatizó.
Derechos
Dijo que visitaba con frecuencia a las familias de la comunidad que viven en esa zona de la localidad y “me da mucha pena cuando se acerca un nena de 7 y 11 años, que tiene que bajar y pararse en la puerta del CPEM 68 para agarrar un poquito de wifi” para hacer sus actividades escolares.
“No voy a mirar para el costado como han mirado tantos. Si hay que cargar una mochila me pongo al frente de cargar esa mochila”, aseguró Stefani.
Contó que el proyecto incluye la concesión de los accesos a la cascada Inacayal, el Mirador del cerro Belvedere y el Cajón Negro “a la comunidad parta fines turísticos”.
Adelantó que en ese lugar “se emplazará una sala de salud, donde habrá medicina mapuche y espacio para artesanías mapuches”. Enfatizó que los ingresos que surjan de la concesión de los accesos serán utilizados “para poder pagar los importes del acceso al suelo”. “Nadie le va a regalar nada, si hay acceso a un terreno también los van a tener que abonar”, aseveró.
“No avalo ni justifico ninguna ocupación ilegítima”, afirmó con vehemencia. “Somos respetuosos de los derechos, respetamos la propiedad privada y eso quiero que quede bien en claro”, sostuvo Stefani.
Admitió que se trata de un proyecto que va a generar debate en la comunidad. “Quiero decirles que se va a respetar la propiedad privada, a cada uno de los vecinos, pero no voy a discriminar. Eso que le quede bien claro”, puntualizó.
Y expresó que no le gustaría que alguno de los niños de otras familias de esta localidad, “tengan que vivir en la comunidad y no pueda hacer sus tareas porque no tienen luz, ni internet”.
“Quiero igualdad de derechos para todos los chicos y chicas. Y me siento orgulloso de tramitarles (a los niños de la comunidad mapuche) el transporte escolar, la recolección de la basura y me hago cargo de mis palabras”, afirmó.
“Que la justicia diga qué es ilegal y qué no es ilegal”, pidió el jefe comunal. Y planteó su confianza en el relevamiento territorial que prevé la ley 26160 de comunidades indígenas.