Hace casi 13 años que Ricardo y Elvira forjaron juntos un emprendimiento que tomó vida en cada uno de sus productos que son de lo más variado, y van desde las artesanías en maderas regionales, hasta dulces, mermeladas, y algo más.
“Lihuén Almacén Patagónico” es un proyecto que tuvo sus inicios hace casi 13 años junto a Ricardo, quien desde un principio se enfocó en el trabajo de artesanías, mientras que su pareja, Elvira, se dedicó a la realización de telar de bastidor y telar mapuche.
Con la idea de recibir a todos los turistas que paraban a disfrutar de Villa la Angostura, ambos decidieron ser parte de la Ruta de Artesanos y Productores, y abrir su propio Espacio Taller en el año 2010.
De esta manera, Ricardo se dedica a concretar ideas y hacer arte con una gran variedad de materias primas que ofrece la Patagonia, ya sea la madera del árbol ciprés, nudos de coihues, pino ponderosa, e incluso maderas recicladas que están curadas en aceites naturales o con barnices al agua.
“También hago trabajos a pedido ya sean mesitas ratonas, bancos para jardín, carteles con la numeración de las casas, entre otros. No muebles grandes, pero sí petit muebles, algunos tengo en exposición en el taller, y otros los realizo a pedido”, indica.
Luego, con mucho esfuerzo y empeño dieron un gran salto en su marca que invitó a que la innovación y la variedad sean parte de su proyecto al plantar sus propias plantas de frambuesa, y así crear distintos sabores dulces y de textura sedosa como los de frambuesa, rosa mosqueta, frutos del bosque y frutilla, ideales para el desayuno o la merienda.
Con ese impulso, en el 2013 sumaron el licor fino de serbal que se basa en los frutos del sorbus, tratándose de los típicos árboles que se encuentran en la localidad pero con la receta secreta de que está hecho bajo una receta alemana.
“La conseguimos gracias a unos turistas alemanes que vinieron a casa y ellos después nos enviaron la receta. Por lo que hasta el momento somos los únicos que lo elaboramos en todo el país”, relata el emprendedor a LA ANGOSTURA DIGITAL.
Sin dudas, reinventar, innovar y crear se trata de un sello personal que predomina en su marca, ya que la imaginación no tiene límites cuando la cantidad de materiales hacen posible un sinfín de ideas.
Por lo que en el 2017 nació el “Framchoc”, una confitura de frambuesa con chocolate que contiene una textura de pasta untable, realizado con chocolate amargo del 70% de cacao, y tratándose de un producto libre de gluten certificado por el Municipio que fue elaborado en la Sala de Elaboración.
Todos sus productos pueden encontrarlos en su Instagram @Lihuenalmacenpatagonico, o en su Espacio Taller que está ubicado en la calle Ñorquin 873, en Barrio Norte de 10 a 19 hs. “Por suerte en estos años que llevamos con el emprendimiento, ya tenemos un porcentaje de turistas clientes que cada vez que vienen a la villa nos vienen a comprar. En cuanto a las artesanías también hacemos envíos a través del Correo Argentino a todo el país”, concluyó.