Desde hace casi 8 años, Matías Louzao se dedica a fabricar cuchillos artesanales en cabo de madera regionales, volteo de ciervo, alpaca o hueso, y vende sus productos a lo largo y ancho del país desde su taller ubicado en la Ruta de Artesanos y Productores.
Siempre lo rodearon los cuchillos desde pequeño, sobre todo en el campo y en la caza junto a su padre, quien le regaló su primer cuchillo. Hace 8 años comenzó a elaborarlos como un hobbie, y hace 5 años por un tema de discapacidad, lo jubilan y decide mudarse a Villa la Angostura donde nace su emprendimiento bajo la marca “Don Matías Cuchillos”.
Todo comenzó en una estación de servicio yendo para La Pampa, mientras esperaba cargar combustible para su auto, bajó a comprar café para su pareja, Miriam, hasta que se topó con una mesa repleta de cuchillos, lo cual se trató de una gran tentación para Matías que no dudó en comprarse uno más para la colección, ya que su pasión por ellos siempre estuvo presente, a pesar de que su pareja le suspendiera la compra de diversas piezas.
Al pasar el tiempo, cuando se dio cuenta que no podía pagar por un buen cuchillo, su amigo le propone producir su propio instrumento, y luego de tanta insistencia, se lanzó con la historia de su inusual emprendimiento.
“Me volvía loco cada vez que lo veía, me decía que era fácil, y me explicaba cómo hacerlo. Hasta que un día compré dos hojas, y sinceramente es algo que me produce mucho placer, realmente me fascina hacerlos”, expresó Matías a LA ANGOSTURA DIGITAL.
Por su estado, en un curso que realizó sobre forjado de metales para cuchillería, le recomendaron que lo mejor era que se dedique al encabado, que básicamente es ponerle el mango al fierro del cuchillo.
“Suena simple pero tenés que buscar un balance que le de un equilibrio en el peso, donde empieza el mango hasta la hoja y que quede balanceado, anatómico, funcional y cómodo para usar”, recalcó.
El encabado se realiza en maderas tradicionales, regionales, volteos de asta de ciervo de la región, en hueso de animal (normalmente las tibias) , y también con alpaca.
De acuerdo a lo relatado, las elaboraciones pueden tardar entre 3-4 días pero siempre dependerá de la calidad y de lo que quiera el cliente. En el caso de solicitar un juego de 24 cuchillos y tenedores que vienen en cajas de ciprés, eso llevará mucho más tiempo.
“Son 12 cuchillos, 12 tenedores, un cuchillo y tenedor grande para la parrilla en una caja encabado en ciervo porque es lo más autóctono que tenemos ya que en madera me parece más de lo mismo. Y como me gusta complicarme, también me gusta mucho hacerlo en madera de coihue porque realmente queda muy lindo”.
En cuanto al proceso de producción, Matías explica que les hace un pulido espejo en las hojas de acero al carbono, que son las que se manchan fácilmente pero no modifican su función, ya que además se trata de un acero que es fácil de afilar y mantiene su filo según el tipo de hoja, siendo más práctico que uno inoxidable. Luego, se determina el tipo de cabo que se le colocará ya sea de madera, ciervo, alpaca, o hueso.
A su vez, subraya que en sus piezas se deben tener en cuenta tanto el tamaño de la hoja como el tipo de cabo para lograr el equilibrio perfecto. “Yo siempre recomiendo que el cuchillo multiuso sea de hasta 18 cm, ya que te permite hacer el asado en la parrilla y después podés comer en el plato sin molestar a nadie. Ya de 20 cm se nota la diferencia”, resalta.
Para quienes deseen cocinar en la parrilla, vestir un quincho para los invitados, o hacer un regalo, sus piezas pueden encontrarlos siguiendo la cartelería desde la YPF Norte que los guía hasta su casa-taller ubicado en Los Lagos 295, en Barrio Norte. Además, utiliza mucho el Correo Argentino para enviar sus instrumentos a pedido, y muestra algunas de sus artesanías desde su Instagram o Facebook @Donmatiascuhillos.
“Estoy en la ruta de Productores y Artesanos como me recomendaron, y realmente es algo fantástico porque trabajás desde tu casa, hago lo que me gusta y no tenes que irte a ningún lado ni llevar máquinas, está todo acá, y sólo voy yo”, asegura.
Por último, comentó que su próximo proyecto a concretar se trata de la construcción de un nuevo taller al lado de su casa, que por cierto, tendrá el doble del tamaño para recibir cómodamente a familias enteras, ya que en su actual taller el pequeño espacio no lo permite.
“Estoy con esto, mi local de ventas, mi lugar de producción, estoy muy enchufado, me gusta mucho. Y a partir de ahí veremos la venta en redes sociales. Soy más de la idea de que la gente vea y pueda notar la diferencia con el peso del cuchillo, que se lleven algo que saben que está hecho a mi criterio, que los prueben y que me llamen por cualquier inconveniente que tengan, aunque gracias a Dios, nunca he tenido reclamo alguno” cerró el emprendedor.